Hace apenas un mes te vi comiendo solo en una mesa de "El Cuartito", de Talcahuano y Paraguay. Nosotros estábamos esperando para conseguir lugar donde sentarnos en esa pizzería tan porteña que siempre está llena. Al verte tan solo en la multitud con tu aire de dandy crepuscular, recordé todos aquellos programas de TV de mi niñez y adolescencia donde aparecías y tanto me divertías al hablar de fútbol con tu estilo tan loco, inigualable. Y recordé hasta cuando en el '81 nos colamos con un amigo del colegio en "Polémica en el Fútbol" en los estudios de Canal 13.
De repente terminaste de comer tu pizza y te fuiste entre la multitud. Nadie te saludaba, nadie te decía nada. ¿Como podía ser eso posible? ¿Acaso no se matan las masas para pedir autógrafos a tantos inútiles sin talento alguno de la tele de hoy en día a la salida de los teatros de Carlos Paz o Mardel? ¿Peter y Paula? ¿Ricardo Fort? Y la turba de infelices aclamándolos y rogándoles una mísera foto. Pero a vos, un verdadero grande, la gente ni te hablaba.
Yo te seguí hasta el estacionamiento de El Cuartito y finalmente me animé, y acercándome a vos y mirándote de frente te dije: "¡EL NÚMERO 1!", y vos me contestaste con tono agradecido: "¡que graaaande!". Entonces te pedí una foto, y vos accediste con una verdadera expresión de alegría donde yo leía agradecimiento. Nos sacaron la foto. Entonces yo te dije: "Un honor".
Después de eso nos dimos la mano, y el agradecido fui yo.
Siempre pensé que no hay que ahorrarse las muestras de gratitud en vida, y ahora lo confirmo: creo que te di una alegria en aquella noche, y vos a mi me diste un momento que no olvidaré, en el cual me remonté por un instante a un pasado de inocencia en los mágicos años ochenta cuando me hacías reir tanto por la tele con tus comentarios.
Así que ahora, maestro GUILLERMO NIMO, te doy la "perla blanca" y te digo una vez más, sin miedo a equivocarme:"Siempre serás el número 1 de los comentaristas deportivos" Porrrr lo menos, así lo veo yo!
Por CÉSAR RODRÍGUEZ BIERWERTH
Cuánta nobleza del corazón hay en tus palabras! Cuánto sentimiento genuino, auténtico! Qué alegría le habrás dado esa noche al inolvidable Guillermo Nimo, que supo imponer su estilo tan porteño, tan lleno de humor a sus comentarios deportivos, y que por esos avatares de un tiempo que parece no respetar la edad de la experiencia, de la sabiduría ,deja solos a quienes antes aplaudía ,una época en que solo se idolatra la juventud, a veces hueca, a veces falta de todo carisma de todo talento, y ausente de toda buena educación, cuántos actorcitos , y pseudo actrices sin gracia , que apenas pueden hilar una frase , que muestran su desdén al público y a la Prensa, caminando ligero sin contestar , como si fueran "stars" , huyen de esos fans y esos periodistas sin los cuales no serían NADA. Y sin embargo este verdadero ícono porteño, que se destacó tanto en lo suyo , tuvo la humildad de detenerse, fotografiarse y estrechar la mano de alguien que supo valorarlo, vos César, tal vez le diste al gran Nimo, olvidado y solitario, su última alegría , su último homenaje respetuoso y afectuoso, con esa calidez que mostrás vos en tus historias , saludos, y videos; desde el Cielo , alguien te sonríe hoy. Dana.
ResponderEliminarQué foto hermano, dos porteños de ley, dos genios cada un en lo suyo, gracias por haberle dado ese honor de tu reconocimiento en nombre de todos los que lo admiramos, y ya no podremos hacerlo.Siempre te sigo y te admiro, y ahora, más que nunca.Daniel de Barracas.
ResponderEliminarTe felicito, hermano, comparto con vos la pasión por los fierros, tus cuentos y tu voz de puro metal, ahora te veo abrazando al genial Nimo, te doy la perla blanca " Te eligieron de arriba para ese abrazo al número uno", ¿su última y más sincera felicidad? , muy posible, representaste a muchos, pero lo hiciste vos, te saludo desde Remedios de Escalada :Walter.
ResponderEliminarGracias, Dana, Daniel y Walter por sus comentarios y por entender la importancia de pequeños gestos como ese con el gran Guillermo Nimo, que seguramente le dio una alegría en sus últimos días. Aquel encuentro en El Cuartito no lo olvidaré y confirma mi idea de que en la calle y en la noche están las verdaderas historias.
ResponderEliminarTenés razón, César, en la calle y en la noche están las verdaderas historias, otra de tus frases geniales y tan ciertas, algunos de nosotros , cuando cae el sol, empezamos a vivir, y dejo constnacia que no somos vampiros, al contrario, rendimos homenaje a la vida.Un abrazo , soy Carlos de La Matanza.
ResponderEliminarGenioooo! El último abrazo a un grande , no podía ser de otra manera , tenías que ser vos , César, otra historia para tus obras tan buenas y tan llenas de ese gusto a misterio de la noche porteña.Lisandro de Capital.
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